La ocupación media nacional alcanza el 90% con cientos de establecimientos completos durante julio y agosto. Una alta ocupación se mantendrá todavía elevada hasta el 10 de septiembre.
Sin embargo, la rentabilidad final de los establecimientos se ha visto mermada de nuevo por el descenso del gasto de los clientes en restauración y ocio.
A falta de los datos oficiales del INE, el sector va a cerrar el verano con más de 25 millones de pernoctaciones y 5 millones de viajeros entre el 15 de junio y el 15 de septiembre.
Extraordinario verano para el sector camping en España. Según datos de la Federación Española de Campings (FEEC) la ocupación media nacional este verano ha sido muy similar a la del verano del 2022, con un 80% en julio y prácticamente un 100% durante agosto, con cientos de campings completos. Incluso la buena ocupación se va a mantener hasta el próximo domingo 10 de septiembre.
La inestabilidad climatológica durante la primera quincena de julio especialmente en el norte peninsular (Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco) ralentizó el arranque del verano que sí se inició de manera contundente en todo el país desde mediados de julio hasta finales de agosto. En total, un 90% de ocupación media que, a la espera de los datos del INE de lo próximos meses, confirmará los 5 millones de viajeros y los 25 millones de pernoctaciones en el periodo comprendido entre el 15 de junio y el 15 de septiembre.
Como nota negativa, destacar nuevamente lo ocurrido el verano pasado: un descenso del gasto interno de los clientes en torno a un 25% lo que supone que el beneficio final obtenido por la mayor cantidad de clientes, se reduzca por el menor consumo especialmente en restauración y ocio. Reflejo de esta situación es que sí ha aumentado ligeramente el gasto en los supermercados de los campings (5%) lo que demuestra que los clientes prefieren consumir en sus bungalows y parcelas antes que en los restaurantes y chiringuitos del establecimiento.
Para Ana Beriain, presidenta de la FEEC, “el sector ha vivido un extraordinario verano lo que demuestra que las familias, a pesar del difícil momento económico que vivimos en toda Europa, le dan importancia a desconectar unos días, relajarse y olvidarse de los problemas cotidianos”.
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